Kofi Annan, Secretario
General de la ONU de enero 1997 a diciembre 2006 y Nobel de la Paz en 2001, nos ha
dejado pero nos queda su obra y su legado. El sábado 18 de agosto de 2018
falleció en Berna (Suiza). Oriundo de Kumasi en Gandha (1938), diplomático de
carrera, dedicó su vida a la ONU donde empezó a destacar en 1962 como
funcionario de la Organización Mundial de la Salud.
Fue un líder de la cabeza a
los pies y un referente para los miembros de la propia ONU y de todos aquellos
a los que sus discursos eran más que palabras y sus acciones fueron más que
un titular en los medios de comunicación. Sus mensajes llegaban con facilidad
no sólo a mandatarios de los Gobiernos miembros de la ONU, sino también a la gente, por su contenido y por su forma de expresarse en un lenguaje directo.
Las prioridades de Kofi
Annan fueron la renovación de la ONU; el reforzamiento de sus acciones
encaminadas al desarrollo sostenible; el mantenimiento de la paz y la seguridad
internacional; el fomento y la promoción de los derechos humanos; la defensa de
los valores universales de igualdad, tolerancia y dignidad humana consagradas en
la Carta de Naciones Unidas; la restauración de la favorable opinión pública en
la Organización y – como él decía - “acercando las Naciones Unidas a la gente”.
En 2001 fue galardonado con
el Premio Nobel de la Paz por su trabajo al frente de la ONU para hacer de este
un mundo mejor y más pacífico. Contribuyó a que fuera el diálogo – y no la
guerra – una herramienta imprescindible para conseguir y mantener la paz.
Su legado es inmenso.
Impulsó los objetivos del Milenio contra la pobreza; mejorar la educación en
los países en desarrollo; fomentar la firma del protocolo de Kioto contra el cambio climático;
acciones para salvaguardar el medio ambiente; la creación del fondo mundial para
el sida y para la salud para financiar el aumento de gastos de su prevención y
tratamiento;…
La relación de Rotary Internacional con
la ONU la tiene desde su nacimiento. Rotary tuvo un papel destacado en la
constitución de la ONU. Más de 40 rotarios participaron como Asesores, Consultores
y Delegados en la Conferencia de la Carta de las Naciones Unidas de 1945. Desde
entonces, Rotary cuenta con sede permanente en la ONU y estatus de organización
consultiva directa en las áreas económico y social. Por esta estrecha relación
Rotary señala en su calendario el “Día de Rotary en la ONU”.
Poco antes de que dejara su
cargo como Secretario General de la ONU, aprovechando el “Día de Rotary en la
ONU”, el 4 de noviembre de 2006 Kofi Annan resaltó los importantes lazos entre
ambas Organizaciones. Este encuentro se celebró en la sede de la ONU en Nueva
York al que asistieron Bill Boyd, Presidente de Rotary Internacional de ese
año, así como Luís Vicente Gay, Presidente de la Fundación Rotaria, además de
1.200 rotarios y rotaractianos. Kofi Annan dijo que “durante más de 100 años
Rotary ha estado a la vanguardia del esfuerzo para mejorar las vidas de las
personas en todo el mundo. Y, desde la creación de Naciones Unidas, Rotary ha
sido un magnífico socio para nosotros. Vosotros habéis unido fuerzas con
nosotros en temas de salud, alfabetización y erradicación de la pobreza.
Vosotros habéis trabajado para Naciones Unidas por todo el mundo. Habéis
promovido la paz a través de vuestros programas de intercambio. Y habéis jugado un rol fundamental e
histórico en nuestra misión colectiva de erradicar la polio en el mundo.
Rotary está demostrando que
pueden convivir en paz personas de diferente procedencia, resaltando las cosas que
tienen en común, por encima de aquellas que los diferencian. En esto consiste
nuestro trabajo humanitario.
Esta es la última vez que
me dirijo a vosotros como Secretario General de las Naciones Unidas, por esto
quiero agradeceros en este momento, el magnífico apoyo que me habéis brindado a
mí y a la Organización durante los últimos 10 años. Gracias por entender que
nos corresponde a todos aprovechar este instrumento indispensable, en interés
de las personas para las que está creado. Os deseo que continuéis con éxito en
vuestra valiente misión”.
Kofi Annan tenía siempre presente
a Rotary. La relación y la colaboración era mutua, hubo muy buena comunicación
destacando el liderazgo de Annan con el trabajo de Rotary, organización que une
líderes dispersos por el mundo a través de sus clubes rotarios y rotaractianos
para intercambiar ideas y pasar a la acción en actividades de servicio a los
demás.
En su discurso de despedida
como Secretario General de la ONU el 11 de diciembre de 2006, al referirse a
los agentes no estatales, Kofi Annan mencionó a Rotary al manifestar que “… los
Estados ya no pueden, si es que alguna vez pudieron, hacer frente a los
desafíos por sí solos. Cada vez es más necesario conseguir el apoyo de esos
otros agentes, tanto en la formulación de estrategias mundiales como en su
puesta en práctica, una vez convenidas. Uno de mis principios rectores como
Secretario General ha sido conseguir su ayuda para los objetivos de las
Naciones Unidas, por ejemplo, mediante el pacto mundial con empresas
internacionales, que puse en marcha en 1999, ó en la lucha mundial contra la
poliomelitis, que espero que ya esté en su etapa final, gracias a una
extraordinaria alianza entre el sistema de las Naciones Unidas, los Centros de
los Estados Unidos para el Control y Prevención de Enfermedades y, de manera decisiva,
Rotary Internacional”.
Mucho queda por hacer. Pero
recordar ahora a Kofi Annan, su gran labor para que este mundo sea mejor y sus
palabras de estímulo para los agentes no estatales y, en concreto, para Rotary
Internacional, contribuyen a continuar con acciones
solidarias para que el esfuerzo y el empeño de muchos produzca buenos
resultados y – por ejemplo – se erradique la polio en el mundo para siempre.