Con día nublado, plato de
cuchara. Con esta idea vamos hacia el valle de Guadalest a tomar una olleta de
blat (trigo). Para mi familia y para mí, el mejor sitio para disfrutarla es en La Venta
de Benifato. Y hacia allí vamos.
Pero antes viajamos en nuestro
automóvil con el necesario sosiego dominical. Cada uno sabe lo suyo, pero a
nosotros nos hace falta. El tráfico es intenso en lo que fue autopista, que ya
no lo es ni tiene peaje.
Subiendo hacia La Nucía, este
pueblecito que ha dejado de serlo por su cercanía a Benidorm con todo lo que
les llega de rebote, además de por ser la Ciudad del Deporte y desarrollar con
esto una buena fuente de riqueza, visitamos la Font de la Favara, un pequeño paraje natural. Recordamos la leyenda de Roxana mientras escuchamos su lamento con el susurro del agua de su cascada por no dejarle casar con
quien quisiera, y en concreto con ese muchacho que le había robado el corazón y del
que estaba completamente enamorada.
Pasamos por Polop. Se nos
queda a la derecha de la carretera. La torre de la iglesia resalta en el centro de la
población rodeado de casitas de tejados a dos aguas, y más arriba el calvario que fue
castillo y cementerio. Por aquí venía Gabriel Miró a pasar el verano. Sus experiencias
quedaron plasmadas en algunas de sus novelas.
Muchos campos junto a la carretera
han mudado de color y de arbolado. Ya no son almendros como antes por la dichosa xilella,
que ha hecho estragos por estos lugares. Unos los arrancaron siguiendo una
directiva europea que era injusta con el entorno. Otros lo han hecho los agricultores de estas tierras para
sustituirlos por naranjos, por cierto, hoy repletos de naranjas. Y por olivos.
Vaya acierto, cómo está ahora en las tiendas el aceite de oliva, ¡casi 10 eu el
litro!
En los bancales se nota la
falta de lluvia. Los matojos de esparto languidecen por la falta de agua, y eso
que son de secano. Los pinos van ganado terreno, lo que les dejan los incendios
y la presión urbanística. A veces unos van con el otro o eso dicen los más
ancianos del lugar.
Dejamos Guadalest a la
derecha, siempre tan concurrido de visitantes. Por su belleza y singularidad.
La torre de la iglesia de Benimantell también destaca entre las casitas del
pueblo. Por la carretera general que lo cruza vemos a nuestra izquierda La
Venta de la Montaña. Recordamos jugosas anécdotas de cuanto Paqui y yo éramos
novios …. Ca Rafael en donde antes estaba el restaurante Aitana. Han pasado
años. Pero lo importante es que pasen y podamos contarlos.
Seguimos. Beniardá queda a la derecha de la carretera, más abajo, en la parte trasera del embalse de Guadalets. Hacia adelante Benifato está en la falda de la sierra Aitana. A ambos los queremos, tenemos buenos recuerdos en ellos. Tanto pasado en sus caminos y veredas, por las calles de este pueblo, en La Venta Benifato.
Le pregunto a Oscar, su dueño, por la vida en Benifato. Dice que es tranquila y que no lo cambiaría por otro lugar, no les falta de nada. Tiene consultorio médico, iglesia y cura, piscina municipal para el verano, …. Se lamenta que no haya escuela. Al parecer la administración la dejó perder. Sin niños, los pueblos no tienen futuro, le digo yo. Tampoco hay colmado, tienen que comprar fuera del pueblo lo que les haga falta por lo que es imprescindible el coche. Tienen despacho de pan, lo traen todos los días. Tiene muy buen sabor, ya se lo digo yo. Después de la pandemia el Ayuntamiento abrió un bar en sus bajos comerciales. Da vida al pueblo y sus gentes. Ya no hay hostal, pero lo sustituyeron por apartamentos turísticos, y hay varias casas rurales que se alquilan enteras. Tienen mucho trasiego de visitantes, es un buen lugar para pasar unos días de asueto. Rutas de senderismo, la propia montaña, ciclismo de carretera, gastronomía de la tierra, son su carta de presentación. Además de otras viandas, degustamos una olleta de blat memorable, he repetido tres veces. Nos vamos bien servidos y con la barriga llena después de una mistela de la tierra para endulzarnos los pensamientos. Volveremos.
Nota: en la etiqueta de Valle de Guadalest encontrarás artículos de otras experiencias por los pueblos citados en este artículo.