Desde que se tuvo constancia
que el covid-19 era un virus muy dañino que se extendía por el mundo, se vio la
necesidad de buscar una vacuna. Los científicos han trabajado a marchas
forzadas mientras veían cómo este enemigo invisible paralizaba el mundo entero y
mataba a millones de personas en este año. Varios laboratorios y empresas farmacológicas
la han conseguido y se distribuye ya a nivel mundial. Las vacunaciones empezaron
a distribuirse por China, Rusia y el Reino Unido, después EEUU y los países de
la Unión Europea, y así sucesivamente se irán sumando todos los países de los
cinco continentes.
La distribución de la vacuna y la vacunación de la población no es tarea fácil. Diversas organizaciones solidarias a nivel mundial tienen un gran reto: cómo colaborar para la vacunación masiva en los países en vías de desarrollo en los que sus estructuras sanitarias no están preparadas para vacunar a toda su población. Por su parte, Holger Knaack, Presidente de Rotary Internacional 2020-2021, ante la pregunta de si esta organización participará en las campañas de vacunación contra la covid-19,.responde que “considerando el éxito y la experiencia con la que contamos gracias a nuestra labor para la erradicación de la polio, esta pregunta es natural y oportuna. La respuesta es sí. Desempeñaremos un papel importante”.
Y añade que “esto no significa
que nos desviaremos de nuestro compromiso declarado de erradicar la polio, que
seguirá siendo nuestra mayor prioridad y nuestro único programa corporativo. La
vacunación contra la polio y las actividades de vigilancia epidemiológica deben
continuar sin cesar”.
Desde que en 1985 Rotary
Internacional lanzó la campaña Polio Plus para erradicar esta enfermedad en el
mundo, la mayor iniciativa internacional del sector privado en el campo de la
salud pública, los rotarios están implicados en este empeño. Ahora, toda la infraestructura
que Rotary está usando para erradicar la polio, también se usa contra el
covid-19.
Desde el pasado mes de marzo, la Junta Directiva de Supervisión de la Iniciativa Mundial para la Erradicación de la Polio (GPEI, en sus siglas inglesas), de la que es miembro Michael K. McGovern, que a su vez es Presidente del Comité Internacional de Polio Plus de Rotary, participó en la respuesta mundial de esta pandemia, aprovechando la infraestructura creada para la vacunación y vigilancia epidemiológica contra la polio en muchos países en el mundo. A su vez, en un Comunicado de Rotary Internacional sobre este asunto se manifiesta que “la infraestructura contra la poliomielitis que los rotarios han ayudado a construir ya se está utilizando para abordar y detener la propagación del nuevo coronavirus, además de atender otras muchas necesidades de salud. En Nigeria, Pakistán y Afganistán, donde el personal y los activos de la poliomielitis tienen una presencia significativa, los trabajadores de todos los socios de la GPEI se dedican a la vigilancia, la capacitación de los trabajadores de la salud, la capacitación de contactos, entre otras tareas. A su vez, se han desplegado voluntarios contra la poliomielitis en 13 países para abordar los preparativos y respuesta contra el covid-19”.
Rotary Internacional realiza
sus actividades solidarias a través de los clubes rotarios por lo que “la
Directiva de Rotary Internacional junto a los fiduciarios de La Fundación
Rotaria se reunieron en una sesión conjunta y acordaron que los rotarios tenemos
un papel que cumplir - sigue diciendo Holger Knaack - Los clubes tienen que:
Utilizar los conocimientos de
Rotary sobre la seguridad y eficacia de las vacunas, cimentados en nuestra
experiencia en la erradicación de la polio, para llevar a cabo actividades de
educación y comunicación sobre la vacunación en sus comunidades;
Colaborar, cuando proceda, a
nivel nacional con nuestros aliados en la erradicación de la polio, como la OMS
y el UNICEF, para ofrecer el apoyo de Rotary a las actividades de respuesta a
la COVID-19, incluidas las actividades de vacunación;
Forjar alianzas a nivel local
con gobiernos, empresas y fundaciones para apoyar las actividades realizadas
por Rotary a nivel nacional;
Mediante cientos de proyectos
y subvenciones globales, los socios de Rotary ya demostraron lo que pueden
lograr para concienciar, entregar equipos de protección personal esenciales y
prestar apoyo a los trabajadores sanitarios de primera línea;
Tenemos un último llamado a
la acción: ayúdennos a combatir la desinformación y el cada vez más pujante
movimiento de resistencia a las vacunas. Nuestra labor de difusión de
información en las comunidades será fundamental: necesitamos transmitir el mensaje
de que las vacunas salvan vidas”.
Los rotarios son gente de acción y están preparados para afrontar acciones solidarias de todo tipo para paliar esta situación, incluso distintas a las vacunaciones por el covid-19. Este virus ha ocasionado serios problemas económicos y sociales en las comunidades donde actúan los clubes rotarios por lo que también se implican en acciones para paliar el hambre de la población, así como en la donación de medios para la protección personal contra el covid-19 al personal de diversas asociaciones solidarias. En estas dos acciones locales está involucrado el Rotary Club Alicante Costa Blanca D2203, del que formo parte, en una actitud de servicio a los demás ante esta situación de emergencia sanitaria mundial.
En España, enviadas desde Bruselas, se recibieron las primeras vacunas contra el covid-19 en los aeropuertos de Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla, Vitoria, Mallorca y Tenerife, para su reparto a través de las Comunidades Autónomas. A principios de este mes de diciembre el Ministro de Sanidad Salvador Illa, dijo que “la llegada de las vacunas será progresiva y suficiente. España contará con 140 millones de dosis. Habrá vacunas para todos y sobrará. España tiene todas las capacidades preparadas – siguió diciendo el Ministro - para que cuando lleguen las dosis se pueda inmunizar a la población con todas las garantías necesarias”. Que así sea.