La carrera de Cantó

 

Francés Cantó era un vigía que guardaba la costa ante visitas inesperadas y violentas de piratas ó enemigos del país y de la Corona reinante. Todos los días hacía rondas de vigilancia. Todos los días eran iguales y que así siguiera siendo era buena señal. Pero un día, el 28 de diciembre de 1370, vio en la playa del Tamarit (en Santa Pola) que algo grande se tambaleaba en la orilla del mar. Le llamó pronto la curiosidad, aunque fue el respeto a su profesión lo que le hizo acercarse con sigilo. Era un arca. En su interior, unos ropajes ocultaban un cuerpo. Al destaparlo se llevó una gran sorpresa. Lo que vio fue una mirada agradable, serena, de ojos pequeños, que parecía que le sonreían. ¡La Virgen María!, junto con la Consueta con la partitura del Misteri d´Elx. Tenía que comunicarlo a las autoridades civiles, militares y eclesiásticas de Elche, de quienes dependía la jurisdicción de estas costas. A lomos de su caballo cabalgó veloz a la ciudad para comunicar la buena nueva.

Desde entonces, todos los 28 de diciembre se celebra lo que en Elche llaman La Carrera de Cantó, conmemorando al mismo tiempo La Venida de la Virgen a Elche. Hoy, a partir del disparo de una potente bombá, a las 15 horas, se ha anunciado la carrera del legendario guardacostas Francés Cantó. Este año el jinete ha sido Francisco Sanmartín a lomos del caballo tordo de nombre “Hosco XXXV”. Desde la huerta recorre las calles de esta ciudad ilicitana hasta las puertas del Ayuntamiento. Allí le han recibido las autoridades, junto con numeroso público, y Cantó ha dado noticia del hallazgo de la imagen de la Virgen de la Asunción.

Gigantes, cabezudos, el Calendura (1), el Calendureta (1), el grupo de los aragoneses con sus canciones y sus castañuelas, las diferentes Comisiones de Fiestas, con sus estandartes e indumentarias. Una corte de niños vestidos con los colores de la Senyera. El Cantó, sobre su caballo. Un pregonero, con un pergamino sostenido por sus manos, ha leído un bando a viva voz. En él se relata el descubrimiento que Cantó hizo en la playa. Después se ha iniciado una romería hacia la Huerta de las Puertas Encarnadas (Hort de les Portes Encarnades).

 

 

Cuando han llegado al Hort de Les Portes Encarnades se le ha cantado una salve a la Virgen de la Asunción que allí se encontraba, con el posterior disparo de una traca aérea de 2 kilómetros de longitud y potente cohetá. Posteriormente, se ha trasladado en romería-procesión a la Virgen de la Asunción, Patrona de la ciudad, a la Basílica de Santa María. A su entrada, en nombre del todo el pueblo ilicitano, le ha dado la bienvenida el Rvdo. D. Francisco Conesa Ferrer, Vicario General de la Diócesis Orihuela-Alicante, junto con el Himno de la Venida de la Virgen, cantado por un Grupo de cantores ilicitanos dirigidos por el Maestro Ildefonso Cañizares Botella.

Los años impares, como este, la romería-procesión de la Virgen se inicia desde esta Hort de Les Portes Encarnades. Los años pares esta romería-procesión se hace desde la playa de Santa Pola.

(1) Cerca del Ayuntamiento está la Torre de Calendura, reloj de autómatas construido por Alonso Gaytán en 1572. El mecanismo del reloj tiene dos figuras, bautizadas en 1759 como Miquel Calendura, de mayor tamaño y que hace sonar las horas, y Vicentet Calendureta, más pequeño, y que anuncia los cuartos.