Siempre ha sido para mí motivo de aplauso la dedicación de aquellas personas que dedican su tiempo al servicio de acciones que favorezcan a otros. Siempre es motivo de elogio las que a través de una organización buscan el bienestar de otras que en la mayoría de las veces ni se conocen.
En este mundo global donde las diferencias entre el norte y el sur, entre los países ricos y los pobres, es tan grande. En este país donde la crisis se está cebando con los más débiles. En esta sociedad tan egoísta donde prima el éxito a cualquier precio. Que haya organizaciones, instituciones, empresas privadas, que se acuerden de las necesidades de los demás, que dediquen esfuerzos y busquen financiación para ayudarles, es digno de felicitación.
El pasado 23 de octubre, víspera del Día Mundial de la Lucha contra la Polio para los Clubes Rotarios, asistí a la cena benéfica organizada por el Rotary Club Alicante Puerto (constituido en junio de este año), celebrada en la Finca Lo de Díe, invitado por su presidente D. Enrique Martín Gullón.
El primer club rotario fue fundado en 1905 en la ciudad de Chicago por el abogado Paul Harris y tres amigos suyos. Es una organización de servicio humanitario distribuida por todo el mundo a través de los clubes rotarios.
Varios son los proyectos de servicio en la sociedad. El más importante es la erradicación mundial de la polio. Desde su inicio en 1985 los rotarios han contribuido para que este proyecto alcance unas dimensiones muy importantes con más de quinientos millones de dólares y miles de horas de trabajo para la inoculación de más de mil millones de vacunas a niños de todo el mundo.
A Enrique le he oído comentar en reiteradas ocasiones, y lo corroboro, que ya tenemos una edad para responsabilizarnos en actividades y organizaciones al servicio de los demás, como él lo hace con el Club Rotary Alicante Puerto. Muchas veces manifestamos que hay que cambiar esto ó aquello, pero ¿qué hacemos?. Junto con otras 198 personas, mi mujer y yo contribuimos en esta cena benéfica con nuestro granito de arena. Porque muchos granitos de arena hacen montañas.
La finalidad de esta cena benéfica fue la de lograr fondos necesarios para atender diversos programas de servicio. El Rotary Club Puerto de Alicante colabora con un proyecto del Rotary Club Elche Ilice para la ayuda a la Fundación Vicente Ferrer en un proyecto de irrigación en la India. A su vez, tienen ya un proyecto propio: una colaboración económica para la formación de jóvenes sin recursos de Alicante que destaquen en algún aspecto humanitario, académico, deportivo, … Además, contribuyen con el proyecto Polio Plus, del Rotary Internacional, para la erradicación de la poliomielitis a nivel mundial.
El Rotary Club Alicante Puerto, “portuario y marinero”, como manifestó Enrique en su discurso inaugural, soltó amarras hace unos meses. Desde entonces navega viento en popa a toda vela, allende los mares, sorteando tempestades. Y son los puertos donde arriba, con sus gentes y sus necesidades, motivo de sus travesías. Son los sueños de tantos, las ilusiones de muchos, sus desvelos.
Pascual Rosser Limiñana
webs relacionadas:
web sitio oficial del Rotario en español: http://www.rotary.org/es/Pages/ridefault.aspx
http://www.rotaryclubalicantepuerto.com/
fotos de la cena cedidas por Carmen, socia del Rotary Club Alicante Puerto
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